Una de las principales características y atractivos del póker es su variedad y riqueza, pues cuenta con un buen número de variantes que permiten una mayor diversión en este popular juego de cartas. Aunque el Texas Hold’em es, sin duda, la opción más conocida, no es ni mucho menos la única. A lo largo de este artículo se presentarán las modalidades más destacadas y sus principales reglas.

Texas Holdem

La versión con más seguidores tanto en el poker online como en los casinos físicos. En el Texas Hold’em todos los jugadores reciben dos cartas ocultas, que sólo ellos pueden ver, y sobre el centro de la mesa se enseñan cinco más en tres turnos (tres en el flop, una en el turn y otra más en el river), que son comunes para todos los jugadores. El ganador será aquel que consiga la mejor jugada con cinco cartas, haciendo cualquier combinación entre sus dos particulares y las cinco comunes mostradas en la mesa.

Omaha

La siguiente versión con más seguidores en el ranking de variantes del póker es la que recibe el nombre de Omaha. Es una evolución de la descrita anteriormente y es considerada, por muchos jugadores aficionados y expertos, como la más emocionante de todas.

En este caso y, a diferencia de la variante Texas Hold’em, los jugadores reciben cuatro cartas propias y cinco comunes. Los jugadores con esas nuevas cartas deben conseguir la mejor combinación de cinco cartas, usando tres de las cinco cartas comunitarias y dos de las propias.

Seven card Stud Poker

Junto a las dos modalidades ya mencionadas, el Seven Card Stud Poker es otra de las más habituales en los casinos, y también una de las más difíciles de dominar.

En este juego cada uno de los integrantes de la mesa recibe siete cartas durante el transcurso de la mano, y deberá ganar, al igual que en los casos anteriores, con la mejor jugada usando solo cinco naipes. Como es una variante stud, es decir, de póker descubierto, cada jugador recibe un número determinado de cartas bocarriba y otras bocabajo.

El reparto sería el siguiente: en la primera ronda, se toman dos cartas (una tapada y otra destapada). A partir de ahí, se suceden las rondas de apuestas, la partida finalizará la mano con cuatro cartas descubiertas y tres cubiertas por cada jugador.

Diferentes opciones para jugar al póker

Aunque las variantes del póker presentadas con anterioridad son las más populares y se juegan tanto en locales físicos como en línea, está cambiando mucho la forma en que los jugadores se acercan a este juego.

No solo la versión digital en internet cada día crece en número de participantes, sino que hay una modalidad que está cogiendo fuerza rápidamente, se trata del video póker. En este sentido, mientras que con el póker online los jugadores experimentan prácticamente las mismas sensaciones que en un casino real, al enfrentarse a otros jugadores, en el video póker el usuario juega con una máquina.

La dinámica de este sistema es similar al tradicional, pero en este caso se experimenta de manera individual en una máquina y ni siquiera se trata de vencerla, sino de conseguir la mejor combinación de cartas, siendo en este aspecto similar a las tragamonedas.